El latigazo cervical, conocido médicamente como whiplash, es una lesión común que afecta al cuello, generalmente como resultado de movimientos bruscos de aceleración y desaceleración. Es frecuente en accidentes automovilísticos, aunque también puede ocurrir en deportes de contacto o caídas.
El latigazo cervical ocurre cuando los tejidos blandos del cuello (músculos, ligamentos y tendones) son forzados más allá de su rango normal de movimiento. Este impacto puede causar microlesiones, inflamación e incluso daño en las articulaciones cervicales y los discos intervertebrales.
Los síntomas pueden aparecer inmediatamente o después de unas horas o días:
El diagnóstico comienza con un historial médico detallado y un examen físico. En algunos casos, se pueden solicitar pruebas de imagen, como:
El tratamiento depende de la gravedad de la lesión, pero generalmente incluye:
En casos severos o crónicos, puede requerirse:
La mayoría de los pacientes con latigazo cervical se recuperan completamente en semanas o meses con un manejo adecuado. Sin embargo, en algunos casos, el dolor puede convertirse en crónico, lo que requiere un enfoque multidisciplinario para su tratamiento.
Si experimentas síntomas de latigazo cervical, consulta a un profesional de la salud para un diagnóstico y tratamiento oportuno.